Al contrario que los indicadores de pH convencionales, las tintas indicadoras de estas tiras están químicamente unidas a fibras de celulosa. Como resultado, la posibilidad de desteñir, incluso en soluciones muy básicas, queda totalmente descartada. La medición de los valores de pH se puede realizar incluso en soluciones sin tampón o con tampones muy débiles, ya que las tiras pueden dejarse en solución hasta que se completa el último cambio de color. Los campos de color se mantienen definidos individualmente sin solaparse. Esto permite una comparación más precisa con la escala de color; las tintas especiales garantizan una diferenciación aguda entre los valores individuales de pH.